Fitch ve perspectivas negativas en Latinoamérica y probabilidad de impagos

La agencia de calificación Fitch advirtió que una tendencia a la baja en las notas de Latinoamérica y reveló que ha puesto a siete países en perspectiva negativa por primera vez a raíz del impacto de la pandemia de COVID-19, mientras sus analistas analizan los riesgos de impago debido a la “multitud de “shocks” que enfrentan.

“Hay que ser conscientes de que estamos analizando la probabilidad de impago. Los países se están volviendo más vulnerables y tomaremos acciones para reflejar ese incremento en la vulnerabilidad”, destacó en una conferencia retransmitida por internet la directora de Calificaciones de Deuda para Latinoamérica de Fitch, Shelly Shetty.

La agencia rebajó ayer miércoles la calificación de México a BBB- con perspectiva estable, el grado más bajo de inversión, por el COVID-19 y la caída en los precios del petróleo, y hoy señaló que Argentina, Ecuador y Surinam están en diferentes niveles dentro de la “categoría” C, que precede a la de impago, porque tienen “un sufrimiento financiero extremo”.

“Las tendencias de calificación negativa han ganado fuerza en 2020. Actualmente tenemos siete deudas soberanas (…) en perspectiva negativa. Es la primera vez que vemos esto, cuatro de cada siete países con grado de inversión están en perspectiva negativa, incluyendo Chile, Colombia, Uruguay y Panamá”, a los que se suman Aruba, Costa Rica y Bolivia.

“MULTITUD DE SHOCKS”
El equipo de analistas de Latinoamérica atribuyó la tendencia bajista en la región a tres factores: un deterioro macroeconómico que se ha “intensificado” con “el shock doble” del coronavirus y la reducción en el precio del petróleo; un deterioro “sincronizado” de los balances financieros, y unas condiciones económicas globales impactadas por medidas de emergencia.
Preguntada por la posibilidad de impagos, Shetty sostuvo que los países están azotados por “multitud de shocks” y entran en juego sus posibilidades de “absorberlos” a través de los marcos regulatorios y las políticas, mientras algunos están peor “equipados” para salir adelante al ser “dependientes del turismo” o “exportadores de materias primas”.

“Esta crisis es de una escala sin precedentes, así que no nos sorprendería acabar viendo más rebajas en las calificaciones”, advirtió la experta.

CAÍDA EN EL CRECIMIENTO
Fitch asume un escenario 2020 en el que el PIB global se contraerá un 2 %, el de Estados Unidos en torno al 2 % y el de China menos del 2 %, con el barril de Brent en un precio medio de 35 dólares y alza hasta 45 el año que viene. “En este contexto, esperamos una caída del crecimiento en Latinoamérica y que el PIB regional se contraiga un 2,6 %”, dijo Shetty.

“Destacamos que realmente hay una contracción más aguda que la de 2008-2009. Esta vez esperamos que todos los países se contraigan a excepción de Guatemala, que tiene un crecimiento del 0 %, y Paraguay, con un modesto 1 %”, explicó, con caídas “de calibre” en las tres grandes naciones: Argentina (-4 %), México (-4 %) y Brasil (-2 %).

Latinoamérica, apuntan los analistas, ha llegado a este punto desde un “lento periodo extendido” de crecimientos medios anuales del 1 % entre 2015 y 2019, por lo que comparada con otras regiones del mundo, “desafortunadamente va a liderar la contracción” y su “recuperación va a ser más atenuada respecto a otros mercados emergentes en 2021”.

FINANZAS PÚBLICAS, EN EL FOCO
Las finanzas públicas eran un “factor limitante” y un “punto débil” en varios países incluso antes de la crisis del COVID-19 y Fitch espera que empeoren en toda la región debido al descenso en los ingresos asociado a los menores precios de las materias primas pero también por la implementación de paquetes de estímulo fiscal para dar alivio a la economía.

Para la agencia, las medidas fiscales más amplias se han visto en Perú, Brasil y Chile mientras que México “llama la atención” por la estrechez de las mismas, pero no descarta nuevas rondas de estímulo adicionales por lo que “el cien por cien de los países verán un incremento de duda en 2020, con una media del 6 % del PIB”, que se extendería a 2021.

“Las bajas calificaciones ya reflejan eso: Argentina tiene una CC, donde el impago es probable, Ecuador una C, donde pensamos que el impago es inminente, y Surinam triple C, donde pensamos que el impago es una posibilidad”, abundó.

RIESGOS POLÍTICOS Y SOCIALES
Por otra parte, los calificadores valoran y advierten que los gobernantes en Latinoamérica “claramente se han unido en diferentes países para aprobar medidas de emergencia y enfrentar el ‘shock’ de la pandemia, pero el riesgo social y político no se puede descontar si la gestión de la pandemia es percibida como pobre por la sociedad en conjunto”.

En ese sentido, consideraron que hay aspectos que se vieron a lo largo la región en la segunda mitad del año pasado y ahora tienen “potencial de agravarse en la recesión”, como los “disturbios civiles y las actividades de protesta” por “la desigualdad de ingresos o los problemas de corrupción”.