Inversión latinoamericana en el extranjero cae un 90% por el covid y Brasil
La inversión extranjera directa (IED) de América Latina cayó un 90% en 2020 debido al impacto de la pandemia del covid-19 y “la reversión de beneficios de las empresas brasileñas en el exterior”, según el informe Global Latam 2020, presentado este miércoles.
El estudio, realizado por la Secretaría General Iberoamericana y el Instituto de Comercio Exterior de España (ICEX Invest in Spain), analiza los datos de 2020 hasta el tercer trimestre e indica que casi toda la caída se debe a la «contracción» de las inversiones brasileñas. Sin esto, el descenso de la IED regional “habría sido solamente del 2%”.
«Esta caída se debe principalmente a que las corporaciones de Brasil (la mayor economía de la región) repatriaron más fondos desde sus filiales en el exterior de lo que invirtieron en ellas, sin lo cual la caída habría sido de apenas un 2%», explican las instituciones responsables del estudio en un comunicado.
Más allá del caso brasileño, la mayoría de los países registraron caídas de emisión de IED “inferiores a la media mundial”, que se situó en un descenso del 42%.
Así, Colombia registró una bajada del 39%; Chile, de un 15%; Argentina, de un 21%; y hubo países en donde se incrementó la inversión, como el caso de México, con un 55%.
En la presentación de la tercera edición del informe, participaron la consejera delegada de ICEX Invest in Spain, María Peña, y la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, así como el editor del documento, Adrián Blanco.
«La inversión extranjera directa tiene que ser un elemento muy importante de la recuperación», avanzó Grynspan, quien destacó el hecho de que el flujo de inversiones no sufrieran «un gran parón», sino que «siguieron funcionando a pesar de la situación tan dura» que originó la pandemia.
Las grandes empresas reducen operaciones pero no las detienen
Las grandes empresas latinoamericanas redujeron sus operaciones, pero a pesar de la crisis sanitaria y económica, no las detuvieron. Así, la inversión acumulada de la IED de todos los países de la región llega a los US$750,000 millones y es un 18% superior a la registrada un año antes, según el estudio.
El análisis destaca la operación de la petrolera estatal colombiana Ecopetrol y «su alianza estratégica con Occidental Petroleum para extraer petróleo en los Estados Unidos por valor de US$1,500 millones». O el caso de la minera brasileña Vale, que adquirió New Steel Global, empresa radicada en los Países Bajos.
Además, el informe recuerda que la mexicana América Móvil «consolidó su posición en el mercado brasileño con la compra de Nextel por US$905 millones»; y la mexicana Cinépolis «redobló esta apuesta por el mercado asiático con la adquisición del 40% del capital de Cinemaxx, una cadena de cines en Indonesia, por US$110 millones».
Aparte, la presencia de las empresas latinoamericanas en España se «ralentizó», pero tampoco se detuvo.
La inversión directa anual de la región, cuarto inversor en términos acumulados en España por detrás de Estados Unidos, Reino Unido y Francia, «se situó entre los €2,000 y los €4,000 millones en los últimos años» (unos US$4,700 millones al cambio actual).
Sin embargo, la pandemia también traerá una previsible «fuerte contracción de la inversión en España» con el precedente ya de los tres primeros trimestres de 2020, cuando se redujo un 85% respecto al mismo periodo del año anterior.
A pesar de ello, la consejera delegada de ICEX Invest in Spain celebró que España sea un «claro beneficiario» de estas inversiones («solo por detrás de Estados Unidos»), así como que la IED de América Latina sea «cada vez más relevante».
La sostenibilidad, clave para la internacionalización
La sostenibilidad, dice el estudio, se está convirtiendo en un factor «clave» en la internacionalización de las empresas «debido a la creciente regulación nacional e internacional» en materia medioambiental.
Multinacionales de la región, como la empresa brasileña de cosmética Natura o la cementera mexicana Cemex, se han convertido en «referentes» en dicha materia, «con la que apoyan su expansión internacional».
El informe asegura que existen «oportunidades» de adaptación medioambiental en el sector minero, siderúrgico, agroindustrial o en de la energía.
«América Latina es una región rica en fuentes de energía eléctrica renovable, lo que puede ser a la vez una motivación para atraer inversiones extranjeras y un activo para desarrollar capacidades en las empresas locales que se puedan explotar en su expansión internacional», destaca.
También subraya que, desde 2010, se observa un «incremento sostenido» en las inversiones de capital privado de inversionistas latinoamericanos en empresas tecnológicas o «startups» extranjeras para acceder a «tecnologías específicas no existentes en la región, a la amplitud y la profundidad de mercados más maduros y a la estabilidad monetaria de mantener activos en dólares o euros».
«La preferencia fundamental es el mercado estadounidense y sus empresas, seguido por europeas, particularmente en españolas».