OMC destaca la importancia del Acuerdo FID para fomentar el desarrollo sostenible

El 22 de enero, la Directora General Adjunta Johanna Hill inauguró el seminario en línea sobre los beneficios del Acuerdo sobre Facilitación de las Inversiones para el Desarrollo (FID), organizado por los cocoordinadores de la iniciativa, la Embajadora Sofía Boza (Chile) y el Embajador Jung Sung Park (República de Corea). El evento brindó la oportunidad de intercambiar opiniones y escuchar a académicos de renombre y representantes de organizaciones internacionales destacadas, quienes compartieron sus experiencias e ideas sobre la pertinencia y los beneficios previstos del Acuerdo.

El DDG Hill destacó que las negociaciones del FID han estado abiertas a todos los miembros de la OMC que desearan participar y que, tras más de seis años de duro trabajo, el Acuerdo cuenta con el apoyo de casi 120 miembros participantes de todas las regiones. La mayoría de los participantes en el FID son países en desarrollo miembros, incluidos 23 países menos adelantados (PMA).

DDG Hill señaló que, a diferencia de otros acuerdos más tradicionales de la OMC, el Acuerdo IFD no consiste en negociar concesiones de acceso a los mercados. Más bien se centra en mejorar la transparencia y la eficiencia de las normativas y los procedimientos de inversión, con el fin de que las economías sean más eficientes y atractivas para los inversores extranjeros y nacionales.

Destacando que el texto también contiene disciplinas que abordan la conducta empresarial responsable y medidas contra la corrupción, subrayó que a través de la mejora de la transparencia, la rendición de cuentas y la gobernanza de los procedimientos de inversión, el Acuerdo pretende no sólo atraer más flujos de inversión extranjera directa, sino también inversiones de mayor calidad. El objetivo último es fomentar el desarrollo sostenible, afirmó.

Con el telón de fondo de numerosas crisis en las que muchas economías en desarrollo y con limitaciones fiscales se enfrentan a un crecimiento débil, a precios elevados de los alimentos y la energía y a un aumento de la pobreza, la DDG Hill afirmó que muchos participantes en el FID consideran el Acuerdo como un instrumento para anclar y galvanizar sus economías.

Se refirió a los datos de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, que indican que la brecha de inversión en 2023 se disparó hasta los 4 billones de dólares, frente a los 2,5 billones de 2015, en un momento en que el imperativo de la transición a una economía con bajas emisiones de carbono exige por sí solo billones de dólares en inversiones verdes. Mientras tanto, los flujos de IED hacia los países en desarrollo experimentaron un descenso del 9% en 2023.

DDG Hill también hizo hincapié en el aspecto de desarrollo del Acuerdo IFD, que además de establecer puntos de referencia internacionales sobre la facilitación de la inversión, también incluye amplias disposiciones de trato especial y diferenciado (TED). Estas disposiciones, inspiradas en las del Acuerdo sobre Facilitación del Comercio (AFC) de la OMC, permiten a los países en desarrollo y a los PMA aplicar el Acuerdo IFD a su propio ritmo. También estipulan que debe proporcionarse asistencia y apoyo para el desarrollo de capacidades con el fin de ayudar a los miembros en desarrollo y PMA a aplicarlo.

Además, según la investigación realizada por el Instituto Alemán de Desarrollo y Sostenibilidad, el Acuerdo IFD tiene el potencial de producir ganancias sustanciales en el bienestar mundial, siendo las mayores para los países de ingresos bajos y medios.

Sin embargo, la DDG Hill señaló que la consecución de estos beneficios depende de la correcta identificación de las necesidades de los países en desarrollo. Subrayó el papel clave que desempeña la evaluación de las necesidades para ayudar a los países en desarrollo y a los PMA miembros a identificar y evaluar sus necesidades y prioridades en materia de asistencia técnica y desarrollo de capacidades. Animó a los participantes en la iniciativa IFD, especialmente a los donantes, a contribuir a estas evaluaciones de necesidades.